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La madera del Yasuní: el Estado reconoce su incapacidad para controlar la tala ilegal

Diario El Comercio, edición digital

Quito, 30 de junio de 2006

El cerco a la madera del Yasuní se cierra

Redacción Sociedad

En la carretea Coca-Tiwino es frecuente encontrar madera apilada junto a esta vía. La mayor parte proviene del interior del Parque Nacional Yasuní, el único lugar donde aún hay bosque nativo en Orellana.

Ana Albán, ministra del Ambiente, reconoció que su cartera de Estado no posee los recursos suficientes para controlar el tráfico y la tala ilegal en esta zona.

Albán hizo esta declaración el miércoles cuando recibió del consorcio chino Andes Petroleum Company Limited (Andes Petro) uno de los dos puestos de control que se instalaron en el límite noreste del Parque Yasuní.

Por su parte Zhang Xing, presidente ejecutivo de Andes Petro, se comprometió a mantener los lineamientos ambientales de la corporación canadiense EnCana, de la cual adquirió sus activos en el Ecuador.

Los dos puestos ubicados en Tihuano y Kupi tienen capacidad para albergar a cuatro personas con todas las comodidades y están equipados. Allí dos policías de la Unidad de Protección Ambiental y un inspector de Vigilancia Verde controlarán que no se explote madera ilegal.

Albán puntualizó que están en conversaciones con el Ejército para que un militar se una a cada puesto de vigilancia.

Ayer, el Ministerio del Ambiente denunció que el equipo técnico de Orellana, Sucumbíos, Napo y Pastaza ha recibido amenazas de muerte "de gente interesada en que el control forestal no se ejecute". Por el momento las inspecciones en Nueva Loja se han suspendido.

[fuente]
http://www.elcomercio.com/noticia.asp?id=50563&seccion=8

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