Bogotá, 5 de octubre de 2005
Meses después de que el pueblo ecuatoriano sancionara por medio de la destitución, la traición y los excesos de un presidente: El presidente Colombia lo acoge con su brazo protector.
No es un caso aislado si lo relacionamos por ejemplo con el de Alan García, o el golpista venezolano Pedro Carmona.
Si bien, dentro del Derecho Internacional está contemplada la posibilidad de que un país le brinde el asilo a quien lo solicite; es importante resaltar que curiosamente, Colombia ha recibido una buena cantidad de peticiones de este tipo, por parte de personas que han tenido que salir huyendo de sus respectivos países, después de traicionar o afectar directamente a sus pueblos.
Parece existir una respuesta obvia a la pregunta de: ¿Por qué casualmente Colombia es uno de los lugares preferidos por los delincuentes derechistas para refugiarse?
Es de anotar que los países pueden considerar aceptar o no la solicitud de asilo que se les dirija. Curiosamente nuestra Cancillería nunca se ha dado a la tarea de revisar que tan conveniente es para las relaciones bilaterales y para la ética común, recibir ciudadanos extranjeros que hayan cometido atropellos (sean estos de índole política, económica, etc.) contra la población de sus países.
Probablemente, en vista de lo anteriormente señalado, los gobernantes colombianos practican el ayudar a los otros, por si algún día también les toca a ellos. Esto, por lo de la similitud ideológica.
El Frente Social y Político cuestiona la decisión gubernamental de asilo a Gutiérrez y ratifica el apoyo al pueblo ecuatoriano y a todos aquellos que sigan construyendo el camino hacia la libertad y la democracia.
Mesa Ejecutiva Nacional
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