Francisco de Orellana, 1 de abril de 2007
La medida de hecho que llevaban a cabo las comunidades del campo Palo Azul, fue suspendida el miércoles pasado, atendiendo la petición del gobierno. La producción en el campo se ha normalizado desde entonces.
Desde ese día, se han producido negociaciones entre las comunidades y Petrobras, sin que hasta el momento se haya llegado a acuerdos satisfactorios. El gesto de buena voluntad de las comunidades, al levantar la medida de hecho para negociar, no ha sido correspondido por la compañía brasileña.
Nunca aceptaron asfaltar ni un kilómetro, ha sido el gobierno quién se ha comprometido a hacerlo.
En el tema laboral se ha llegado a acuerdos sobre monto de salarios. Dónde las negociaciones se han estancado, es el punto referente a los convenios de compensación con las comunidades afectadas. Petrobrás insiste en no firmar convenios con todas las comunidades al considerar (según el criterio de ellos) que no todas las comunidades del bloque les afecta la actividad del campo. La compañía no ha mostrado voluntad de llegar a acuerdos, más bien ha empleado todos estos días la táctica de crear complicaciones, alargar los asuntos, y otras más. Todo con el objetivo de confundir y cansar a la gente. Se ve que ya no tienen prisa, una vez que el petróleo ha vuelto a fluir. Se ve que las negociaciones son más ágiles si se para la producción.
Las comunidades nos han manifestado que si está actitud de Petrobras no cambia, no va a quedar otra salida que retomar la paralización.
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