Paralizamos la construcción del OCP




Red Amazónica de Afectados por el Oleoducto de Crudos Pesados
Región Amazónica Ecuatoriana, Lago Agrio, Provincia de Sucumbíos

8 de mayo de 2002




El 6 de mayo desde la 8.00 horas campesinos y moradores del sector de Jambelí en la Vía lago Agrio-Quito, Sucumbíos, nos tomamos la Ruta OCP para impedir su avance. Niños, mujeres y hombres, iniciamos la construcción de ranchos en la Ruta para que el consorcio OCP (Repsol, Occidental y otras petroleras) indemnice de manera justa los daños causados en nuestras fincas y la contaminación despiadada causada por ellos.

La misma acción se ha reproducido el 7 y el 8 de mayo en los kilómetros 22, 24, 27 y 34, así como en la ciudad de Cascales y se han levantado acciones solidarias en las poblaciones adyacentes a los oleoductos secundarios y en algunos bloques de prospección sismica de la región. La Juntas Parroquiales de Jambelí y Sevilla han expresado su solidaridad con la protesta, así como la organización Acción Ecológica, la Asamblea de la Sociedad Civil de Sucumbíos, organizaciones de derechos humanos y comunidades cristianas de base.

Manuel López, Vocero de Turno de la Red Amazónica, dijo que la posición de los afectados ha cambiado respecto a las transnacionales petroleras que manejan la OCP pues el cuento de las 50.000 plazas de trabajo se ha derrumbado o el de indemnizaciones justas ha quedado en el olvido, mientras la verdad es que enfrentamos a soldados y policías que invaden nuestras propiedades cuando los y las compañeros-as no aceptan las imposiciones de la OCP.

Denunciamos que 80 uniformados, a órdenes de la compañías Techint y OCP que los financian, irrumpen en las fincas, apresan a los afectados que se oponen al OCP, los maltratan y golpean y los amenazan de muerte. Hay denuncias de los compañeros G. Moreta, y A. Chasipanta, quienes en compañía de un niño de brazos fueron maltratados a nombre del ministerio de Energía y arrojados sobre la vegetación cercana a su finca. El pasado 3 de mayo, en el Km. 31 de la vía a Quito, fue amarrado y torturado frente a la maquinaria de la OCP, el compañero Héctor Espinoza y colocado a que mire como sus cultivos eran arrasados por los invasores de la OCP; su esposa Luz F. Fue salvajemente arrastrada hasta un pantano, donde desfalleció a causa de una afección cardiaca que sufre. Causar terror es la otra táctica adoptada por la transnacional contra quienes no sucumbimos ante sus amenazas.

A nuestra medida se suma la paralización de la construcción del oleoducto a la altura de Papallacta por parte de los trabajadores contratados quienes han denunciado que sus patrones los maltratan, les pagan sueldos de hambre, les sobreexplotan y no tienen ningún seguro. Además los obreros han manifestado que la Compañía no cumple con las leyes laborales ecuatorianas.

Llamamos a las organizaciones solidarias del Mundo y del País a expresarse ante esta barbarie que atenta contra los derechos humanos y ambientales de la Amazonía.

Hoy pedimos al Ecuador que se revise el Contrato, que la OCP pague todos los daños causados y se vaya.



GRACIAS POR SU SOLIDARIDAD Y HAGAN CONOCER ESTE COMUNICADO A SUS ORGANIZACIONES FRATERNAS Y A SUS AMIGAS Y AMIGOS.

QUE CESEN LA REPRESIÓN Y EL ENGAÑO Y QUE SE HAGA JUSTICIA.

LES SALUDAMOS CON ALEGRÍA, CON LA CERTEZA EN SU APOYO A NUESTRA LUCHA.



Comisión de Prensa de la Red Amazónica de Afectados por el OCP






 
Llacta!    Portada |  Organizaciones |  Comunicados |  Noticias