Desgobierno del Gobierno en Galápagos

Comité Ecuatoriano para la Defensa de la Naturaleza y el Medio Ambiente (CEDENMA)

Boletín de prensa

Quito, 15 de septiembre de 2004

 

La Gobernadora de Galápagos de forma diligente, lo que no ocurrió semanas atrás con la huelga y tomas de los pescadores (de instalaciones del parque y sitios de visita), ha procedido a desalojar a los guardaparques de las instalaciones del Parque Nacional Galápagos en Puerto Baquerizo, Isla San Cristóbal.

Esta es una acción más de las muchas que revelan el torpe manejo que el gobierno nacional ha hecho y hace de los temas y problemas de Galápagos. El conflicto (que no ha hecho sino empezar: ya hay manifestaciones públicas de rechazo) se ha suscitado por la no menos burda decisión del gobierno que ha socavado la institucionalidad y estabilidad de la Dirección del Parque Nacional Galápagos (PNG).

Sin ninguna razón técnica o administrativa que lo justifique el gobierno cesó en funciones al anterior Director, rebajando ese cargo a simple botín político, botín jugado en las soterradas transacciones politiqueras del gobierno y sus aliados y compinches.

En efecto, el cargo fue entregado al diputado Vinicio Andrade, vinculado, como la Gobernadora, al sector pesquero artesanal de Galápagos, sector cuyos integrantes son la "base" electoral de esos políticos. El diputado escogió a su "ungido", nada menos que un asesor directo del sector pesquero, Fausto Cepeda. La cadena de desaciertos tiene un antecedente muy cercano y ligado a otros.

El gobierno nacional y varios de los representantes de sus ministros, encabezados por el de Ambiente, entregaron al sector pesquero una resolución de la Autoridad Interinstitucional de Manejo, AIM, hecha a su medida para la pesca de pepino de mar, una especie en situación crítica, que ha sido depredada por las pesquerías anteriores "autorizadas" en condiciones de chantaje por el sector pesquero.

El cuadro no puede ser más calamitoso para la conservación, para los recursos de la Reserva Marina Galápagos y para el destino de este Patrimonio Natural de la Humanidad.

El cuadro completo es el siguiente: el sector pesquero artesanal de Galápagos, desprestigiado por una huelga violenta que alteró la paz de las islas y las actividades económicas de terceros y se tomó oficinas públicas y de manera audaz sitios de visita turística (amenazando con quemarlos), y golpeado duramente por el fallo del Tribunal Constitucional que desechó su demanda de amparo constitucional contra una anterior resolución de la AIM, recibió de forma graciosa, impensada, el regalo soñado: podían pescar pepino de mar en zonas prohibidas, y pescarlos de tamaños menores a los recomendados. ¡Para colmo, el gobierno anunció y efectuó una reducción del presupuesto (lo que se tradujo en disminución del personal) del Parque Nacional encargado de vigilar y controlar las labores de pesca y de monitorearlas !! Y por si esto no fuera poco, le sacó al Director del Parque para poner al frente de él (es decir del PNG, de esta instancia estrictamente técnica, clave para la conservación y manejo de las Areas Protegidas de Galápagos) a un asesor del sector pesquero, sin un concurso previo de merecimientos.

El ratón cuidando el queso, jueces y parte, el regulado regulador. ¿Qué más se puede pedir? Indignantes cosas de Ripley, en nuestro hermoso, querido y desventurado país.

Solo se podía esperar esto de un gobierno involucrado en tanto escándalo de corrupción, que por copar pequeños espacios de poder no ha trepidado en incumplir políticas de Estado para Galápagos, en anular los avances que el Ecuador ha hecho en este campo haciéndolo retroceder décadas.

Pírrica victoria de un gobierno mendaz y miope que gana cuando en realidad pierden el país y la Humanidad. Y claro que se puede pedir más: con total desembozo, estando así las cosas y el prestigio del país por los suelos, el gobierno espera que siga normal el flujo de fondos de la cooperación internacional para la conservación de Galápagos.

No sólo que eso, por obvias razones no ocurrirá ("invertir en saco roto": peligran inversiones por más de 50 millones de dólares) sino que son altas las probabilidades de que se concrete una advertencia hecha hace poco por la UNESCO: declarar a Galápagos como PATRIMONIO MUNDIAL EN PELIGRO, por la incapacidad del Estado ecuatoriano de administrar y manejar el archipiélago.

Como medida emergente, el Sector de Conservación, Ciencia y Educación de Galápagos y el sector ambientalista no-gubernamental del país, representados por el CEDENMA, exigen que la Dirección del PNG deje de ser un botín para los traficantes de poder e influencias. Propone que su nombramiento sea el fruto de la decisión de un órgano colegiado, tras un concurso de merecimientos, sobre la base de claros términos de referencia, para que el cargo (de no libre remoción) sea desempeñado por personas de elevado perfil técnico, idóneas y apolíticas.

Una reforma reglamentaria en este sentido podría ser la salida a este grave atolladero en que se encuentra el Parque Nacional Galápagos, otrora orgullo de nuestro país.

 

Lcdo. Vicente Pólit
Presidente del CEDENMA

 

[+info]
http://www.cedenma.org/

 

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